William y Harry estaban destinados a romper su lazo de hermandad —pero aún hay remedio

Los rumores que hablaban sobre la áspera relación entre los hermanos se han confirmado luego del lanzamiento de Spare, la polémica autobiografía del príncipe Harry, en la cual, revela todos los detalles su rivalidad y sobre los conflictos que han atravesado. Es más, incluso dijo que William era su ‘archienemigo’.

Por eso, de la mano de confesó que su hermano lo agredió físicamente y después pidió no decírselo a Meghan.

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La Luna en William y Harry

La luna es el mecanismo emocional de las personas, es la forma en la que se actúa desde las emociones y cómo se establecen relaciones con los demás. Nuevamente se puede ver el signo de Cáncer en el príncipe William y, esta vez, para el príncipe Harry, está presente el signo de Tauro.

Ahora bien, ¿cómo podrían a llegar a entrelazarse estas energías? Por un lado, el mecanismo de la energía canceriana se basará en los valores familiares, el hogar y la protección de este. Por eso, no es de extrañarse que el príncipe heredero eligiera lo que considera más “grande” sobre su hermano.

En este caso, se trata de proteger a algo que es mucho más importante para él, que su propio hermano. Por el lado de Harry, su Luna en Tauro, muy probablemente, hará que se enfoque en sus propios deseos y en su familia más cercana. Además, Tauro es un signo fiel y que dará todo por su pareja. De esta forma, y gracias a sus energías taurinas, se puede justificar todos los sacrificios que Harry realizó por Meghan.

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¿Hay posibilidades de reconciliación entre William y Harry?

Probablemente sea el tiempo el que se encargue de calmar las aguas entre estos dos hermanos de la realeza. Ambos tienen energías muy parecidas, predominantes del signo fuego (explosividad, enojo, determinación) y de tierra (sostén, rigidez y terquedad) y esto puede generar que sus discusiones duren más de lo que deberían, debido a esa gran capacidad de perseverancia que ambos tienen, la cual podría desembocar en una lucha sin fin de egos.

Lo que sí se sabe es que, más allá de las diferencias, el Agua (Cáncer) y la Tierra (Virgo) pueden complementarse perfectamente. Será cuestión de que William y Harry dejen de lado sus egos y sus fuertes personalidades para dar paso a un nuevo comienzo.