Es irónico que Pedro I de Rusia, el zar de dos metros de estatura, tenía cierta obsesión por los enanos. En su corte se regocijaba del acompañamiento y entretenimiento de estos enanitos —junto con algunos bufones— y hasta organizó una boda falsa para ellos. ¿Ya lo sabías?
¿Cuál fue la importancia de los enanos sobre los bufones para los zares?
Aunque los bufones eran un regalo temporal para una corte específica en toda Europa, los enanos tenían una función permanente y hasta se les registraba en “la corte de los enanos”.
Esta estrecha relación dio lugar a roles más allá de ser ‘payasos’ para la realeza o los zares. Los enanos de la corte podían servir como sustitutos de niños e hijos, diplomáticos y más, y era factible que recibieran una pensión y más beneficios.
Claramente también los usaba como entretenimiento y durante eventos lujosos salían a divertir al público. Según la historiadora Lindsay Hughes, Pedro usó a los enanos para crear espectáculos que reflejaran a la sociedad rusa y en particular los aspectos de su corte real que él encontraba ridículos.
La extraña boda falsa que Pedro el Grande organizó para uno de sus enanos
En uno de los episodios más raros de la corte, el zar organizó una lujosa boda falsa para el enano Yakim Volkov (también llamado Komar). La leyenda cuenta que su hermano, el zar Fyodor Alexeyevich, se lo regaló a los 9 años y que Volkov salvó a Pedro durante los disturbios de Moscú en 1682.
Esta boda falsa la hizo Pedro, según la historiadora, porque se estaba “burlando” de la boda de su sobrina Anna con Frederick William, misma que duró por una semana con banquetes, fuegos artificales y todo tipo de divertimento.
Yakim Volkov fue el novio y estuvo acompañado por múltiples enanitos —Pedro envió a todos los enanos de Moscú hacia la catedral de San Petersburgo para llevar a cabo la boda, y se dice que los encerró.
Además ordenó que se hagan vestidos y trajes lujosos para todos los enanos: camisolas con trenzas de oro y botones, pantalones de vestir y cualquier prenda para lucir de gala. Así, la “boda falsa de miniatura” se llevó a cabo en la catedral y el banquete en el palacio Menshikov.
72 enanas y enanos desfilaron en la procesión de la iglesia, y en el banquete se acomodaron en pequeñas mesas largas mientras había público alrededor viéndolos de forma entretenida.
La boda terminó con una pelea entre enanos debido a que estaban muy borrachos por la cantidad de vodka que tomaron y tanto el público como la familia real se dedicó a disfrutar de ese “espectáculo”.