Cinco trucos efectivos para escribir una calaverita literaria (y no fracasar en el intento)

Hay elementos que están intrínsecamente relacionados con el la Catrina de José Guadalupe Posada, el flor de cempasúchil. Sin embargo, hay otro elemento que trasciende los terrenos de lo material y se convierte en un auténtico reto creativo: las calaveritas literarias.

Aquí te contamos qué son, dónde surgieron y un par de trucos fáciles para escribir la calaverita literaria perfecta.

¿Qué son las calaveritas literarias?

A la mitad del camino entre un haiku japonés y un poema lírico, las calaveritas literarias son composiciones breves que deben obedecer una métrica en verso.

Digamos que son como pequeñas historias con rimas asonantes o consonantes en donde, a modo de epitafio, enfrentamos a un personaje con la muerte. Como las festividades de noviembre no son un momento de tristeza, sino de celebración de nuestro destino invariable, estas composiciones suelen estar cargadas de ironía y comicidad.

¿Dónde surgen las calaveritas literarias?

Se cree que la primera calaverita literaria la escribió el monje franciscano Fray Joaquín Bolaños en 1792. Ahí, el religioso abordó la muerte desde la perspectiva novohispana y le quitó solemnidad, al convertirla en un personaje que juguetea con sus víctimas. “Estaba alguien haciendo algo, cuando llegó la muerte, y se lo llevó al escusado”, podría ser un buen ejemplo de esto.

Cómo hacer una calaverita literaria
Ricardo del Olmo / Pexels

Con el tiempo, las calaveritas se transformaron en un vehículo para homenajear a seres queridos o criticar a políticos y personas que forman parte de la vida pública del país. Uno de los casos más notables sucedió durante el Porfiriato, cuando autores utilizaron estos poemas para alzar la voz mediante la sátira en contra del gobierno de Porfirio Diaz.

5 trucos indispensables para escribir una calaverita literaria

Estos son algunos trucos que debes tener en consideración al momento de escribir una calaverita literaria.

  • Enfócate en que su construcción sea breve pero concisa. Escribir cuatro versos de ocho sílabas cada uno podría ser una salida fácil a tu embrollo creativo.
  • Sé lo más descriptiva posible. Contar con palabras detalladas la situación y a los personajes expuestos en tu texto podría ayudarte a crear situaciones cómicas que aderezaran la lírica tradicional. Recuerda ubicar a tu personaje principal haciendo una actividad cotidiana antes de enfrentarlo con la huesuda. 
  • Escoge a un personaje que quieras o admires. La sátira siempre es bienvenida, pero las calaveritas literarias suelen ser mejores cuando son protagonizadas por alguien a quien queremos o seguimos. Llevarlo al inframundo a través de eventos graciosos no solo enaltece el fin espíritu festivo de la época, también nos ayuda a abrazar nuestro destino y prepararnos para lo que venga.
  • No olvides las rimas. A pesar del estilo juguetón de este tipo de textos, las calaveritas literarias no dan espacio para cambiar su construcción, especialmente en el caso de las rimas. Concéntrate en redacciones simples en donde los sonidos de las palabras finales de cada oración coincidan entre ellas. Estas rimas pueden ir sucesivas (A,B,A,B) o intercaladas (A,B,B,A). Elige la que prefieras, pero esta última podría ser la más fácil de ejecutar.
  • Diviértete. Una calaverita literaria tiene que ser divertida, así que no dudes en explayarte y jugar con las palabras, expresiones y situaciones a explorar. 

¿Estás lista para escribir la mejor calaverita literaria?