Tiger Woods, Charlie Sheen, Mel Gibson, Kanye West… Nombres que se han convertido en sinónimo de hombres tóxicos. Son esos que llegan a tu vida llenos de promesas y flores y, como un virus terrible, acaban con tu paciencia, con tu cordura y con tu amor.
Esta clase de hombres —los infieles, los mentirosos, los narcisistas y los agresivos— están de más en tu vida. Eso lo sabes perfectamente. El problema es que, como tantas mujeres, no sabes reconocerlos de entrada. Deslumbrada por su carisma, sus frases seductoras y sus románticos detalles, o (seamos honestas) cegada por tu necesidad de vivir el amor, no eres capaz de ver las señales que te gritan: “¡Alto, detente!”.
Cuando conoces a un hombre con “posibilidades“, necesitas tener a mano una guía que te permita “leerlo” correctamente. Verlo tal como es, con la cabeza clara y libre de sueños románticos, te ayudará a determinar si él es el hombre para ti. ¿Dónde hallar esa información? La doctora Lillian Glass, experta en el lenguaje corporal y en relaciones tóxicas, trata este tema en su libro Toxic Men (Hombres tóxicos), una guía para ayudarte a reconocer a tiempo a estos ejemplares.
Aprende a reconocer a los hombres tóxicos
De acuerdo con la Dra. Glass, los hombres tóxicos tienen tres características en común:
- Provocan emociones negativas en ti.
- Se comportan mal contigo: no te tratan con el respeto y la consideración que mereces.
- Hacen que te sientas mal contigo misma, lo cual afecta tu comportamiento y tu nivel de autoestima.
Es por eso que es vital reconocerlos, y mientras más pronto, mejor para ti y para tu corazón. A continuación, te ofrecemos cinco ejemplares de alto contenido tóxico. Aprende a detectar sus tácticas para que puedas vacunarte contra ellos.
Tóxico #1: el mentiroso y manipulador
Esta clase de hombre te hace sentir maravillosa de entrada, cuando está en proceso de conquista. Te halaga, tiene detalles únicos, te dice cosas hermosas. ¿Tú? Crees que has encontrado a tu príncipe azul.
Su táctica: Trata de hacerte sentir tan bien, que quieres estar cada momento a su lado. El problema surge cuando lo contradices o le niegas algo que él quiere. Entonces muestra sus verdaderos colores y todo el encanto se evapora en un dos por tres. Este hombre es un experto a la hora de torcer tus palabras y de “reescribir” la historia, para hacerte creer que eres tú la que has fallado. Muchas mujeres, seducidas por su encanto, tratan de complacerlo en todo con la esperanza de recuperar al príncipe azul del comienzo de la relación. En realidad, están atrapadas con un maestro manipulador.
Tóxico #2: el controlador abusivo
Quiere saber lo que haces las 24 horas del día, y a cada momento te dice lo que debes hacer y la forma exacta —y correcta, según él— de hacerlo. Si no accedes a seguir su “plan”, te intimida con su ira y su desaprobación.
Su táctica: Usa la ira o la agresividad, las cuales pueden ir escalando hasta volverse peligrosas. Si este es el caso, no importa que te jure que te ama ni que te diga que todo lo hace por tu bien. De más está decir que si estás con un hombre que es abusivo emocional, verbal o físicamente, debes buscar ayuda para, de la manera más segura para ti y para tus seres queridos, salir de esa relación.
Tóxico #3: el ‘pobre diablo’ autodestructivo
Es la víctima a quien todo le sale mal, pues lo rodea la mala suerte. Tú tienes que rescatarlo a cada paso, muchas veces perjudicando tu trabajo, tu economía y hasta tus relaciones con otras personas, que no entienden tu dedicación a este ejemplar que nada aporta y todo exige.
Su táctica: Culpar a los demás, las circunstancias, la vida y la buena o la mala suerte, de todas sus desgracias. De esta forma te hace creer que los problemas nunca se deben a su inercia, su irresponsabilidad o su falta de iniciativa. ¿Lo reconoces?
Tóxico #4: el ‘yo-yo’ narcisista
Todo comienza con él y termina con él. Es el centro del universo, el personaje más importante en su mundo… y en el tuyo. El narcisista por excelencia no reconoce los sentimientos ni las necesidades ajenas; lo único que le interesa es satisfacer sus necesidades, alimentar su ego. Tú te sientes relegada a un segundo plano; debes lograr todos sus deseos.
Su táctica: Hacerte sentir agradecida de compartir la vida con un ser tan importante y especial. Si siempre te sientes abrumada, pues vives para complacerlo, estás ante un narcisista que, como un vampiro emocional, te deja ¡exhausta!
Tóxico #5: el eterno huidizo
Nunca sientes que lo “tienes” completamente, porque él no quiere compromisos. Se te pierde los fines de semana o te dice que no está preparado para algo tan serio; no responde tus llamadas ni está ahí, a tu lado, cuando lo necesitas. Es el clásico egoísta que quiere pareja cuando le conviene o le hace falta, y desea sentirse libre cuando la relación se le hace incómoda.
Su táctica: Se describe como un espíritu libre e indomable, que no puede atarse a una relación todavía. Quizá insinúa que “algún día”, tal vez cuando los planetas estén alineados, se encontrará a sí mismo y logrará comprometerse. Así te da largas… mientras lo aguantes.
Si aún no estás segura si tu hombre es tóxico, pregúntate:
¿Cómo me siento yo en esta relación? ¿Satisfecha? ¿Incomprendida? ¿Menospreciada? ¿Relegada a un segundo plano?
Después de cualquier interacción con él, ¿cuál es mi estado de ánimo? ¿Triste, nerviosa, ansiosa, deprimida?
Si tu caso fuera el de una amiga… ¿qué opinarías sobre su relación? ¿Pensarías que es la mejor para ella? Entonces, ¿por qué la aceptas para ti? Esta última pregunta es muy importante, porque casi siempre vemos el problema ajeno con más claridad; esto se debe a que lo enfocamos racionalmente, no a través de las emociones.
Qué hacer si estás en una relación tóxica
Cada caso es único y requiere medidas únicas. En algunas ocasiones, cortar con la relación es lo más indicado; en otros, podría ayudar la intervención de un sicólogo o consejero matrimonial. Todo depende, como ya mencionamos, del caso y la circunstancia de cada pareja.
Lo que sí puedes hacer inmediatamente es reconocer la clase de relación en la que estás y determinar por qué sigues en ella. Ponle mucha atención a tus respuestas y a las excusas que usas para seguir con un hombre que te hace sentir mal contigo misma. No adornes tus motivos; sé honesta. ¡Eres tú quien tiene la llave de tu liberación!
Al mismo tiempo, trabaja para elevar tu autoestima, pues esta te ayudará a mantener tu integridad en el amor. Cuando te quieras y te respetes, no atraerás ni tolerarás a hombres tóxicos en tu vida. Si tienes una lista de lo que buscas en un hombre, igualmente haz una de todo lo que tú ofreces. Debes estar consciente de tus virtudes y capacidades. Repasa tus logros y tus “lados fuertes”. Verás que no necesitas un hombre que te complete, sino un compañero que te apoye.