En el bello estado de Yucatán, existe un tratamiento de belleza natural ancestral maya, que rejuvenece y embellece tu piel, se trata del famoso baño maya, una de las actividades más solicitadas en Río Lagartos, Yucatán, por sus maravillosos beneficios para la piel.
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¿Qué es el baño maya?
El baño maya es una de las actividades más solicitadas por los turistas que visitan el hermoso estado de Yucatán, pues además de ser un ritual ancestral único, tiene un potente efecto rejuvenecedor en la piel.
La actividad consiste en untar por todo el cuerpo, una generosa cantidad de arcilla o barro de color blanco que se extrae de la arena blanca de la playa en Río Lagartos.
Este barro contiene grandes cantidades de azufre, minerales, sales y algas, que exfolian, purifican y rejuvenecen la piel.
Se dice que los antiguos mayas, utilizaban esta arcilla blanca como protector solar, repelente de mosquitos, e incluso como un método de camuflaje cuando salían a cazar, pues lograban cubrir su olor a humano, con el característico aroma a azufre del barro.
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Beneficios del baño maya
Quienes ya han disfrutado de esta maravillosa experiencia, aseguran que el baño maya les ha quitado unos cuantos años de encima.
- Su efecto exfoliante regenera los tejidos de la piel, refinando las arrugas.
- También desintoxica y elimina las impurezas de la piel, y actúa como un potente tonificador facial.
- La piel que suave, tersa e hidratada.
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¿En dónde disfrutar del baño maya?
Como ya hemos mencionado, quienes quieren disfrutar de las maravillas del baño maya, tendrán que hacer una parada en Río Lagartos en su próxima visita a Yucatán.
Río Lagartos es una reserva natural en la que se pueden ver flamencos en su hábitat natural, entre otras especies de aves. También es un pueblo pesquero, donde además del baño maya, ofrece actividades pesqueras a los turistas.
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Para el baño maya, Río Lagartos ofrece diferentes tours con transportación en lancha. El recorrido de aproximadamente 3 horas te permite apreciar la belleza de los manglares y la fauna local, visitar zonas donde el flamenco vive y se alimenta en su hábitat natural.
La última parada es el baño maya, una vez que los turistas se han cubierto el cuerpo con el barro blanco, la embarcación parte de regreso a la playa, donde los turistas se enjuagan el barro, que ya ha hecho efecto en la piel de 20 a 30 minutos aproximadamente.
Lo mejor es que la experiencia la vivirás acompañada de un guía certificado, que te describirá a detalle la belleza del lugar yucateco.
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