En Japón pervive la ley sálica, aun cuando se discutió tras el nacimiento, en 2001, de Aiko, la única hija del entonces príncipe y hoy emperador Naruhito. Así, el 8 de noviembre de 2020 se hizo oficial lo que se esperaba: Fumihito, hermano del monarca, se convirtió en el heredero al trono del crisantemo y, después de él, su único hijo varón, Hisahito de Akishino.
La leyenda cuenta que Fumihito y Kiko, su mujer, buscaron un tercer hijo (y que fuera varón) al ver que Naruhito y su esposa Masako (quien padece depresión, se dice que por la presión que tuvo para dar un heredero) no tendrían más hijos.
El nacimiento de Hisahito en 2006 (tiene 15 años), cuando sus padres ya tenían 40 años y dos hijas (Mako y Kako, entonces de 15 y 12 años), le dio paz a la familia imperial japonesa.
Hisahito de Akishino, joven heredero al imperio japonés
“Longevo, tranquilo y esperanzador” eso significa Hisahito, quien recibió su propio emblema, el pino parasol, cuando nació y que se ve en todas sus pertenencias.
Actualmente estudia en la secundaria de la Universidad de Ochanomizu y cuando ingresó, en una de las pocas veces que ha hablado en público de su hijo, Fumihito comentó que deseaba que Hisahito tuviera una vida escolar “lo más rica posible compartiendo experiencias con sus compañeros”.
Con lo que el heredero no contaba era con que sólo un año después, 2019, un hombre ingresaría hasta el pupitre del chico y dejaría dos cuchillos. Aunque el salón estaba vacío y no hubo heridos, no en vano Fumihito y Kiko cuidan la privacidad de su hijo.
¿A qué se dedica Hisahito de Akishino, heredero al imperio japonés?
Por la pandemia, Hisahito tomó clases de modo híbrido y asistió a conferencias y excursiones, como en la que convivió con personal discapacitado de una floristería. Participó en un festival estudiantil y con sus compañeros publicó un video de las entrevistas que hicieron a varias personas sobre la pandemia.
En marzo ganó el concurso de literatura juvenil en Kitakyushu con un texto sobre un viaje a las islas Ogasawara. Y en agosto conmemoró en línea el aniversario del tsunami de 2011, y estuvo en los cinco años de los terremotos en Kumamoto, donde estuvo con supervivientes.
Así, paso a paso, el príncipe hace las actividades de cualquier estudiante y se adentra en otras que serán cotidianas cuando sea emperador. Pero para eso, y para que la presión de dar un heredero varón caiga sobre la familia imperial de nuevo, faltan muchos años.