Felipe de Borbón fue uno de los solteros más codiciados de todos, y no era menos de esperarse —el heredero al trono español siempre ha tenido rasgos cautivadores y un futuro inigualable, al grado de parecer inalcanzable. Finalmente el flechazo se dio con una mujer que pocos imaginarían dentro de su radar, especialmente por no pertenecer a una rama de la realeza. Letizia Ortiz es una licenciada en Ciencias de la Información que quizá nunca habría imaginado que se volvería en reina consorte de España, pero así sucedió. Y para obtenerlo, la periodista Pilar Eyre desentrañó algunas de sus actitudes para cautivarlo —quizá las podamos poner en práctica con otro royal.
¿Cuántas novias tuvo Felipe vI?
En Los hombres de Felipe VI, José Apezarena rescata las tres relaciones previas del príncipe de Asturias antes de dar con una mujer digna de ser consorte. Entre el historial amoroso del rey estuvieron Isabel Sartorius (primer noviazgo del 89); Gigi Howard (estudiante de Ciencias Políticas y modelo, novia a finales de los noventa); Eva Sannum (novia de cuatro años, modelo y sumamente polémica).
¿Cuántos años tenía Felipe de Borbón cuando se casó?
Finalmente llegó Letizia Ortiz y se casaron en 2004. Él tenía 36 y ella 32 —además de que ya había estado casada por el civil con el profesor Alonso Guerrero Pérez, pero se divorciaron en 1999.
Esto fue lo que cautivó a Felipe de Letizia
Pilar Eyre llenó de nuevo su blog en Lecturas con algunas de las cualidades que enrolaron al príncipe de Asturias con la periodista de Telediario. Menciona que el dato de cómo se conocieron fue gracias a un amigo de Felipe, quien bien lo presentó con Letizia y el flechazo se dio solo “por parte de él”.
“Ella se resistía, y esto al príncipe, que siempre lo había tenido muy fácil con las mujeres, lo volvió loco”, rescatan en Lecturas, “le encantaba que fuera respondona, descarada, que supiera de todo, que no se callara nunca, y ese lenguaje popular tan distinto del que utilizaba en su entorno, una endogamia de amigos pijos que se conocían desde la cuna”.
Pero volverse reina de España claramente conllevó a un enorme sacrificio, el de dejar la profesión de periodismo. Después de matricularse en la Universidad Complutense de Madrid en la carrera de Ciencias de la Información, para periodismo, representó un golpe duro de realidad; además colaboró con el diario ABC y la Agencia EFE, fue becaria del periódico La Nueva España y obtuvo un máster en información audiovisual, así como un trabajo en el diario Siglo 21. Por si fuera poco, recibió el Premio Mariano José de Larra, concedido por la Asociación de la Prensa de Madrid, por su labor como ‘mejor periodista menor de 30 años’.
“Tuvo que dejar su profesión y se trasladó a vivir a la sombría casa del príncipe, donde estuvo meses recibiendo clases de Protocolo, Historia, Inglés, Religión, sin poder intervenir en los preparativos de su propia boda ni de su existencia futura”, reflexionó Pilar Eyre en Letcuras.