¡Cómo han cambiado los tiempos! Los miembros de la realeza han dejado la educación privada por instituciones de prestigio internacional.
¿A qué universidades fueron los royals?
Años atrás era inconcebible que una princesa acudiera a la universidad y estudiara una carrera como si se tratara de una joven común y corriente. Por lo general, su educación corría por cuenta de profesores particulares que se encargaban de impartirle determinadas materias.
Ese fue el caso, por ejemplo, de la reina Isabel II de Inglaterra. Ella fue instruida inicialmente por su padre,el rey Jorge VI, y por la institutriz Marion Crawford. Más tarde recibió lecciones privadas de Henry Marten, el vicerrector de la Universidad de Eton, y clases de religión del arzobispo de Canterbury.
La vida universitaria y los royals británicos
El primer heredero de la casa real británica en obtener un título universitario fue el príncipe Carlos. En 1970, se graduó de Historia y Arqueología en la Universidad de Cambridge y, en 1975, recibió su maestría en Artes en la misma universidad.
Sin embargo, la superpopular princesa Diana nunca se destacó en su faceta académica. Según se sabe, acudió a un colegio privado en Suiza, el Chateaud’Oex, cuando tenía 16 años de edad. Pero Diana no llegó más allá de la escuela secundaria y se afirma que la única asignatura en la que sobresalió fue Economía Doméstica. Durante un corto tiempo trabajó como maestra en una guardería infantil, hasta que su boda con el heredero del trono, a los 20 años, lo cambió todo…
En las últimas décadas, las cosas han cambiado y lo usual, y bien visto, es que los jóvenes aristócratas acudan a las aulas, y a sus títulos nobiliarios añadan también uno o más títulos académicos.
Los estudios de la casa Windsor
Para las universidades, tener entre sus estudiantes a uno o varios royals es un plus que hace crecer aún más su prestigio. Un ejemplo: la Universidad de St. Andrews, en Escocia, fue calificada por uno de sus exalumnos, el príncipe William, segundo en la línea de sucesión del trono de Inglaterra, como “la mejor universidad del mundo”. ¿A alguien se le ocurre que pueda haber una publicidad más contundente?
William y su esposa Kate Middleton, hoy duquesa de Cambridge, se conocieron y se enamoraron cuando eran alumnos en esa universidad, fundada hace seis siglos, y ambos concluyeron sus estudios en el 2005: él, en la carrera de Geografía; ella, en Historia del Arte. Los dos se graduaron con honores.
La pareja sigue muy vinculada a la Universidad de St. Andrews, donde aseguran sentirse “como en casa”, yWilliam ha trabajado activamente para recaudar 985 millones de dólares para apoyar a los mejores estudiantes, sin importar su origen social.
Por su parte, el príncipe Harry, cuarto en la línea de sucesión al trono británico, optó por estudiar en Eton College, siguiendo los pasos de su abuelo y de su tío maternos, quienes acudieron a ese prestigioso centro de estudios. Harry estudió Geografía, al igual que su hermano William, y también Historia del Arte.
En la generación más joven de royals, las princesas Beatrice y Eugenia, hijas del príncipe Eduardo y de la duquesa Sarah Ferguson, se destacaron por sus estudios. La primera de ellas estudió en la Universidad de Goldsmiths, en Londres, para iniciar un curso de tres años y graduarse de Historia e Historia de las Ideas. La segunda estuvo en la Universidad de Newcastle, donde cursó Historia del Arte, Literatura Inglesa y Ciencias Políticas.
No está de más aclarar que todos esos centros académicos son muy estrictos al seleccionar a los estudiantes que admiten. Por eso muchos padres se esfuerzan para que sus hijos asistan a ellos, no solo por la esmerada educación que reciben, sino porque en esas universidades pueden alternar con jóvenes aristócratas y de las más adineradas familias del país.
El matrimonio formado por Carole y Michael Middleton, riquísimos, pero plebeyos, son un buen ejemplo de esto. Gracias a que su hija mayor, Kate, logró asistir a St. Andrews, la joven pudo convertirse en la esposa de un futuro rey. Y en cuanto a Pippa, su hija menor, que se graduó de Literatura Inglesa en la Universidadde Edimburgo, mientras estuvo allí compartió casa con lord Edward Innes–Ker, hijo del duque de Roxburghe, y con earl Percy, heredero del ducado de Northumberland, lo cual le abrió muchas puertas en la alta sociedad británica.
Los estudiosos príncipes suecos
Si de princesas universitarias se habla, las de Suecia resultan ineludibles. En especial Victoria, la heredera del trono, quien puede hacer gala de una esmerada educación, diseñada para que en el futuro sea una “reina perfecta”.
Lo interesante es que Victoria tuvo que enfrentarse a un grave obstáculo desde niña: la dislexia, algo que supo vencer gracias a su tenacidad. Después de concluir su bachillerato en 1996, se dedicó a estudiar francés en Université Catholique de l’Ouest, en Angers, Francia. Dos años más tarde, se matriculó en la famosa Universidad de Yale, en Estados Unidos, en la que tomó, durante cinco semestres, cursos de Geología, Historia y Relaciones Internacionales.
Después de hacer pasantías en las Naciones Unidas, en Nueva York, y en la embajada de Suecia, en Washington, D.C., continuó su formación en el Departamento de Paz e Investigación de Conflictos, en la Universidad de Uppsala, en su país natal.
En cambio, su esposo Daniel Westling solo estudió hasta el bachillerato, enfocándose en deportes y recreación de niños y jóvenes. Después se dedicó al negocio del fitness… hasta que conoció a Victoria y, al casarse con ella, se convirtió en Su Alteza Real el príncipe Daniel de Suecia, duque de Västergötland. ¡Y todo, gracias a una flecha de Cupido!
La segunda hija de los reyes de Suecia, la princesa Magdalena, duquesa de Hälsingland y Gästrikland, también se destacó como estudiante. Ella obtuvo su diplomado en Artes enla Universidad de Estocolmo, e inició estudios de posgrado de Organización y Liderazgo en la misma institución académica, como una herramienta para hacer más eficaz su trabajo humanitario.
Desde Mónaco: los Grimaldi y los Casiraghi
El príncipe Alberto de Mónaco se graduó de Ciencias Políticas en el Amherst College, en Massachusetts, Estados Unidos. Su hermana,la princesa Carolina estudió en St.Mary’s School Ascot, en Inglaterra, y en la Universidad de la Sorbona, en París, donde recibió su diploma en Filosofía. En cuanto a Estefanía, la “princesa rebelde”, en su juventud terminó el bachillerato en el colegio Dupanloup, en la capital francesa, pero no se matriculó en ninguna universidad, pues se dedicó a vivir “la vida loca” y a probar fortuna como cantante, modelo, diseñadorade ropa y ¡artista circense!
Los hijos de Carolina de Mónaco han recibido una educación superior en cotizadas universidades. Andrea Casiraghi se graduó en el 2006 de un diplomado en Artes Visuales y Política Internacional en la American University, de París. Entre el 2007 y el 2009, estudió una maestría en Asuntos Internacionales en The New School, en Nueva York.
Su hermano Pierre hizo un curso detres años en Economía Internacional en la Università Commerciale Luigi Bocconi, en Milán. Y Carlota Casiraghi se graduó como licenciada en Filosofía en la Universidad de la Sorbona, en París, en el 2007.
Andrea y Pierre han elegido como esposa y novia, respectivamente, a dos chicas vinculadas a universidades notables. Tatiana Santo Domingo, la esposa de Andrea, estudió Historia del Arte en la American University, de Londres. En cuanto a Pierre, es esposo de la aristocrática Beatrice Borromeo, egresada de la Universidad de Columbia, en Nueva York.
¿Dónde estudian los royals?
La lista de las universidades que han tenido en sus aulas a conocidos royals sería interminable. Como el espacio no alcanza para mencionarlas todas, solo diremos que el rey Felipe de España estudió en la Universidad Autónoma de Madrid y culminó su formación con una maestría en Relaciones Internacionales en la Universidad Católica de Georgetown, en Washington, D.C.
El príncipe Federico, heredero del trono de Dinamarca, estudió Ciencias Políticas en la Universidad de Aarhus, en su país, y luego estuvo un año en la Universidad de Harvard, en Estados Unidos.
El University College, de Durham, y la Brunel University, ambas en Inglaterra, tuvieron entre sus alumnos al príncipe Guillermo, heredero del gran ducado de Luxemburgo. El también pasó por el Institut Philanthropos, en Friourg, Suiza; por el Institut Albert-le-Grand, en Angers, y por la University of Angers, en Francia. En cuanto a su esposa, la guapa condesa Stéphanie Marie Claudine Christine de Lannoy, estudió Filología alemana en la Universidad Católica de Lovaina, en Bélgica.
En la Universidad de Leiden, el actual rey Guillermo de Holanda obtuvo su licenciatura y una maestría en Historia. La reina Máxima se graduó en Economía en la Universidad Católica Argentina, en su natal Buenos Aires.
En fin, que hoy día a los herederos de las coronas y a los miembros de las casas reales se les pide algo más que sangre azul: ellos tienen el deber de formarse en buenas universidades para representar con profesionalismo y dignidad a sus casas reales. Y, ¡claro está!, cualquier universidad del mundo quisiera tenerlos entre sus estudiantes.