Consentirlos con un nuevo espacio para echar a volar su imaginación es la meta, y estas pautas lo harán realidad.
¿La primera? Nada más cool que una divertida colección de cojines estampados o de figuras de animales, estrellas, soles, elementos náuticos… No hay límite.
La segunda: alegra techos y paredes con guirnaldas de luces, banderines y papel tapiz. ¿Algo más? Haz que tus hijos creen arte y lo exhiban como en una galería, o ayúdales a hacer ornamentos 3D que simulen móviles de aves, barcos o mariposas (basta colgarlos en el techo con una armella para obtener un efecto sorprendente).
La tercera: invierte en toques de color y confort, como ropa de cama divina y superdivertida (en tiendas de decoración, como Pottery Barn Kids, hay colecciones de bailarinas, arcoíris, princesas, flores y hasta de galaxias que brillan en la oscuridad, o de los clásicos Star Wars, Paw Patrol, Toy Story o Plaza Sésamo). No debe faltar una alfombra original o colchonetas que sirvan como sofá́ o cama extra para sus amiguitos. ¡La magia está en los pequeños detalles!
Tip: recuerda que un baúl para los juguetes, repisas o estanterías de distintas formas serán básicas si quieres mantener todo en orden. Igual que un perchero de colores, canastas y cajas de madera con ruedas que puedan moverse con facilidad.
CÓMO EMPEZAR…
1. Ten en cuenta sus gustos
Ellos deben ser, sin duda alguna, los protagonistas de la renovación. Un cielo estrellado, un palacio o una jungla… déjalos que echen a volar su imaginación. De hecho, en Pottery Barn Kids tienen unas canastas de mimbre con forma de jirafa, así como edredones y mantas con diseños de este hermoso animalito para crear una auténtica atmósfera de safari.
2. No es necesario gastar un dineral
Encuentra utilidad en cosas que ya tienes en casa, como muebles a los que puedes agregar pintura en tonos divertidos y actualizar con ropa de cama nueva y accesorios.
3. El color es fuente de emociones
Y los pasteles, tan de moda, aportan alegría. Toma nota porque el azul les da confianza, el rosa y el lila estimulan la comunicación y el verde tranquiliza a los niños.
¡Potencia su imaginación!
Crea una tienda que evoque la magia de las noches estrelladas e ilumínala con una guía de luces led. Se ve divina y es fácil de llevar a cabo con un aro de madera y unos cuantos metros de tela.