De acuerdo con cifras de la Organización de Cooperación para el Desarrollo Económico (OCDE), México ocupa el primer lugar a nivel internacional en casos de bullying, siendo más de 18 millones de niños y adolescentes quienes lo sufren. Es importante que mantengas una comunicación abierta y sincera con tus hijos para detectar cualquier tipo de problemática que pueda afectar su integridad o su salud física y mental.
En México, se sumó a la larga lista de tragedias la de Norma Lizbeth, estudiante de 14 años de edad que cursaba la secundaria y que falleció días después de enfrentar en una pelea a su acosadora (bully), debido a los golpes que recibió en la cabeza.
Es muy imperativo que desde casa, le enseñemos a los niños a respetar. Desde pequeños tienen que saber que no está bien reírse de un compañero, que las “bromas” dejan de serlo cuando hieren a otras personas y que las agresiones físicas son intolerables.
¿Cómo saber si tu hijo puede estar sufriendo bullying?
– Hay cambios de humor, se muestra irritable, apático, triste o llora fácilmente
– Sentimientos de repulsión o temor al ir a la escuela
– Somatizaciones: dolor de cabeza, estómago, nervios, debilidad, ansiedad
– En casos más graves puede existir evidencia física
Como lo mencionamos anteriormente, es básico que haya confianza y comunicación con tus hijos para que puedan contarte si atraviesan por un caso de acoso. Habla con ellos sobre el tema de forma transparente y plantea escenarios de ayuda.
Puedes pedir apoyo de un profesional y siempre pregunta en las instituciones educativas de tus hijos, cuál es el protocolo que tienen para casos de bullying además de las medidas que toman para prevenirlo y evitarlo. Crea grupos de comunicación con otros padres y busquen impartir talleres que ayuden a crear conciencia entre los niños.