Vivimos inmersos en el celular, y las generaciones más jóvenes no son la excepción. Debido a esto han surgido numerosos estudios para aclarar qué tan ‘perjudiciales’ son las redes sociales —al menos está la investigación sobre cómo descubrieron que niños y adultos sufren tastornos característicos de los tics al usar excesivamente esta app.
Los afectados por este trastorno tienen entre 10 y 14 años, y entre los síntomas hay “movimientos espasomódicos físicos, arrebatos verbales, parpadeos y carraspeos repetitivos”.
¿Cómo identificar que tu hijo está haciendo retos riesgosos de TikTok?
La mejor opción ante cualquier situación o adversidad es preguntarle cómo se siente. De entrada, notar una actitud distinta (o distante) ya es un foco rojo. En cuanto a TikTok, toma a consideración que:
- la aplicación no tiene verificador de edad a pesar de que lo mínimo para ingresar sea tener 13 años. Así que si tu hijo es menor, es probable que pueda crear su cuenta de TikTok.
- es probable que los jóvenes se involucren en chats con personas totalmente desconocidas.
- en la guía de Wired explican que la página principal (For You Page) es donde más exposición hay a contenido sexual, violento o discriminatorio.
- la ansiedad social y la soledad son otros enemigos silenciosos de la adicción al celular. En este artículo de CBC la autora explica cómo su hijo de 10 años deseó ‘que las redes sociales jamás se hubieran inventado’ porque quedaron lejos ya los años de actividades al aire libre en la escuela y entre amigos.
¿Cómo cuidar a los hijos de la exposición de TikTok y sus retos más peligrosos?
Hay una serie de apoyos para cuidar a los niños de los riesgos en TikTok.
- Comprende la app: Parents sugiere lo que dijo la estatega social Laura Bedrossian sobre alentar a los papás a relacionarse con TikTok: “si tu hijo tiene una red social, asegúrate de entenderla; descárgala y descubre de qué va para atender cualquier duda que tenga tu hijo”.
- Cambia los settings de seguridad en el celular de tu hijo: hoy en día ya hay varias opciones para que haya límites de tiempo, curaduría del tipo de contenido y hasta tener un perfil privado para no involucrarse de más con extraños; también el botón de ‘bloquear’ y ‘reportar’.
- Trata de no juzgar sus actividades pero sí hazles saber cuándo está mal una situación: hablar abiertamente con los hijos sobre por qué tales retos son peligrosas (qué provocan, qué resultados obtienen y cuál es el trasfondo de hacerlo).
- Ayúdale a tus hijos a desarrollar aptitudes digitales: el mundo virtual ya es tan importante como el real, así que muéstrale cómo navegar por internet con seguridad —ellos desarrollarán más empatía por las relaciones digitales, les surgirán más dudas importantes por tocar y abrirán la brecha de conocimiento.