A veces las historias de la realeza no tienen un final de cuento de hadas como las historias nos han predeterminado, pero en ocasiones hay finales felices para las mujeres involucradas porque decidieron hacerse cargo de su propio destino.
Un ejemplo muy claro de ello es Ameera al-Taweel, actualmente filántropa y activista y ex princesa. Ameera terminó con un cuento de fantasía para escribir una nueva historia, y su belleza la llevó a ser apodada “princesa Jazmín” mientras era una royal.
Quién es Ameera al-Taweel, ex princesa Saudí
Ameera nació en Ryhad el 6 de noviembre de 1983 (tiene 38 años); la crió su madre divorciada y sus papás, pero el destino tuvo un cambio de planes para su vida a la joven edad de 18.
Tan solo era una adolescente cuando le concedieron una entrevista con el príncipe Alwaleed bin Talal para el periódico escolar; lo que empezó como una conversación de 10 minutos se tornó en una charla de dos horas.
A pesar de la diferencia de edad de 28 años entre Ameera y el príncipe, se casaron nueve meses después de conocerse, y esta jovencita se convirtió en princesa Saudí. Su esposo, una mente liberal, la introdujo al activismo y la presentó en diferentes proyectos de caridad —inclusive la nombró vicerrectora y de la Alwaleed bin Talal Foundation.
Curiosamente, Amerra y el príncipe Felipe abrieron un centro islámico en la Universidad de Cambridge y le dio una medalla por su compromiso. Otra especie de “conexión” con los royals británicos fue que la entrevistó Piers Morgan, el mismo periodista que dio la polémica “entrevista del siglo” con Lady Di. Y ella y el príncipe Alwaleed asistieron a la boda de Kate y William en 2011.
Debido a las ideas liberales de estos royals, la princesa Ameera empezó a recibir amenazas, incluso por parte de su cuñado, el príncipe Khalid, quien no estaba de acuerdo en sus apariciones televisivas ni en la forma en que se expresaba por las mujeres.
Aunque no está del todo justificado, dicen que este último caso fue la razón del divorcio. En 2013 los príncipes dieron por finalizado su matrimonio y Ameera dejó de pertenecer a la realeza.
La ex princesa saudí que se dedicó a proteger los derechos de las mujeres
En lugar de ser disuadida a dejar su profesión en el activismo como mujer divorciada, tomó impulso para dar el ejemplo y continuar con las actividades filántropas. En 2014 habló con Glamour sobre esta transición.
“El divorcio fue amigable. Quiero ser una de esas mujeres que cuando vean las niñas digan ‘mira, ella se divorció e hizo muchas más cosas de su vida, es una mujer independiente y está haciendo algo bueno por su país”, fue la declaración de la ex princesa.
Uno de los aspectos por los que más luchó al inicio fue para permitir a las mujeres en su pais que manejaran coches, y esperaba convertirse en la primera mujer en manejar por las calles saudíes. Consideraba que el derecho a manejar simbolizaba uno de los puntos más importantes en la libertad de las mujeres.
Claramente también se enfocó en las oportunidades laborales de las mujeres, de su educación y de sus roles en la política. En 2012 la colocaron en la lista de las 100 mujeres árabes más poderosas y recibió el premio “Woman Personality”.
En 2017 Saudi Arabia anunció que por decretoreal levantarían las restricciones que impedían a las mujeres poder manejar.
Ameerah, cuyo nombre curiosamente significa princesa, se casó por segunda ocasión con el billonario Khalifa Bin Butti Al Muhairi en 2018. La ceremonia privada tomó lugar en París y asistió Oprah Winfrey.