Famosos al borde de un ataque de nervios

Muchas celebridades han sido víctimas de quiebres emocionales que han puesto en jaque sus vidas y sus carreras. ¿Por qué huyen a la locura?

El ataque de nervios de Kany West

La realidad nunca se cansa de mostrarnos cuánto puede superar a la ficción. ¿Quién podría imaginar que al hablar de psicosis, dejaríamos de evocar al siniestro Norman Bates para en su lugar remitirnos a Kanye West?

Igual que el personaje de la película de Alfred Hitchcock, el rapero perdió el contacto con la realidad y víctima del delirio tuvo que ser hospitalizado para una evaluación psiquiátrica. Pero por fortuna, y a diferencia del primero, sus divagaciones mentales no pasaron de ser conductas erráticas que desconcertaron a sus fanáticos, además de un par de bravatas en contra de Beyoncé, Jay Z y Mark Zuckerberg.

Rebasado por el exceso de trabajo entre su tour y el lanzamiento de su colección de ropa, una fuerte deshidratación y falta de horas de sueño, en aquel entonces, su mente decidió darse un break y desconectarse, introduciéndolo a un estado de psicosis. Sin embargo, él no ha sido la única celebridad víctima de un desajuste emocional de proporciones épicas.

Otros famosos al borde del ataque de nervios

Tan sólo un par de días antes del colapso de Kanye, durante la premiación de los American Music Awards, una elegantísima Selena Gómez se sinceró con la audiencia. Con la mano en el corazón dijo que a pesar de tenerlo todo, hubo un momento en que se sentía absolutamente “rota por dentro”, por lo que había tenido que parar.

Así explicaba su ausencia de tres meses en las redes y los escenarios, lapso en el que ahora se sabe que estuvo lidiando contra los ataques de pánico, ansiedad y depresión que le sobrevinieron luego de ser diagnosticada con lupus.

A unos metros y visiblemente conmovida, Lady Gaga conectaba con sus propias batallas en contra del quiebre mental y desde luego no pudimos dejar de recordar las dolorosas imágenes de una enloquecida Britney Spears o de una desbordada Sinéad O’Connor.

La misma Kim Kardashian ha confesado que también vivió algo similar luego del asalto que sufrió en París. Después de los momentos de terror e incertidumbre que pasó a merced de los delincuentes, la reina de las selfies comenzó a experimentar un fuerte nerviosismo, resultado del estrés postraumático. Su madre ha declarado que la recuperación de la Kardashian fue un proceso lento, del día a día, que se ha complicado al añadirle la preocupación por lo ocurrido con su esposo.

¿Por qué los famosos sufren fuertes crisis depresivas?

El emotional breakdown no perdona a nadie. “Podríamos decir que es como una sombra agazapada que puede surgir en cualquier momento y bajo la cual podemos quedar atrapados”, dice el psiquiatra José Antonio Domínguez.

Es el resultado de la presión psicológica o el agotamiento físico extremos, mismos que pueden ser causados por un hecho traumático como un duelo inesperado, un gran susto o un estilo de vida muy exigente y demandante.

Su origen también estaría asociado con ciertos padecimientos orgánicos, el consumo de sustancias o cambios hormonales. Tal cosa le ocurrió a Brooke Shields, a quien el baby blues sumergió en una severa crisis que hasta le hizo considerar el suicidio, luego de dar a luz.

 

 

El desequilibrio mental tiene varias formas de manifestarse. Las más comunes son depresión, obsesión o ansiedad en diversos grados. Pero también puede suceder (como le pasó a Kanye) que se traduzca en algún brote psicótico. Esto es básicamente un estado de pérdida de contacto con la realidad, en donde se presentan delirios y alucinaciones incontrolables.

Aunque se puede superar con el tratamiento adecuado y no pasar de ser sólo un episodio aislado, hay casos muy graves que estarían relacionados con esquizofrenias, bipolaridad y paranoias. Lamentablemente, las presiones de la fama, la inestabilidad del gremio y la sensibilidad emocional de los artistas, los mantienen en situación de riesgo.

La larga lista en Hollywood incluye a Carrie Fisher, Demi Lovato, Ashley Judd, Charlie Sheen, Jim Carrey, Mariah Carey, Kirsten Dunst, Kurt Cobain, Axl Rose y varios más, entre los que no olvidamos a Marilyn Monroe y sus desequilibrios, que posiblemente heredó de su madre y que varias veces la llevaron a internarse en instituciones psiquiátricas.

Crisis en la realeza

Finalmente, la realeza tampoco es inmune a las conductas descontroladas y cambios de personalidad provocados por estados altamente estresantes. Los muy conocidos problemas que tuvo Lady Di durante su matrimonio, la llevaron a sufrir trastornos alimenticios. La princesa Masako de Japón desarrolló una depresión mayor, a raíz de los rígidos protocolos de la corte, así como por su incapacidad de engendrar un heredero.

Y de doña Letizia ni quisiéramos hablar, pero sus actitudes marcadamente distantes y los arrebatos de enojo que ha tenido últimamente, han encendido los focos rojos en torno a su estado emocional. ¿Crisis en la casa real española? Esperemos que no.