Famosos de Hollywood que perdieron la cabeza por su personaje

Actores afectados por sus personajes: el trabajo del actor no es una tarea sencilla, aun cuando muchos lo subestimen. Tienen que hacer lo necesario para transmitirnos, a través de su interpretación, la historia de alguien más, ya sea un personaje basado en hechos reales, o bien, uno ficticio.

Hay quienes son tan versátiles a la hora de actuar que nos roban sonoras carcajadas, o nos tienen al límite de la butaca por miedo o suspenso.

En otros casos, conmueven hasta la lágrima y nos provocan el deseo de ir a consolarlos por la tragedia que atraviesan… en la pantalla grande.

Para lograrlo, algunas veces por iniciativa y otras por órdenes del director, recurren a vivir en carne propia lo mismo que su rol y, por su naturaleza, no siempre resultan las mejores experiencias.

Actores afectados por sus personajes

Sus relaciones familiares se han visto afectadas por la forma en que se involucran en su papel. La depresión fue una de las consecuencias que sufrieron, a pesar del éxito de sus cintas. Su actuación marcó un antes y un después en el campo profesional. Han sido reconocidos por su interpretación en las películas que tanta pasión les despertaron.

Björk

Esta multidisciplinaria artista fue contratada para estelarizar Dancer in the Dark (2000), luego de que Lars Von Trier escuchara los temas que la compositora islandesa había grabado justo para esta cinta.

En ella, el director cuenta la historia de una inmigrante checa con una enfermedad hereditaria y degenerativa, causante de ceguera, y de la cual quiere salvar a su hijo. Esta mujer deberá atravesar una serie de conflictos como resultado de la pérdida avanzada de la vista.

Si bien se trata de un musical, la trama no deja de ser fuerte, tanto así que la propia Björk declaró en su momento que vivir tan intensamente el guión la había llevado a desarrollar una profunda depresión, por lo que decidió retirarse del séptimo arte con tan sólo un filme.

No sólo fue lo dramático de la película: es bien sabido que la cantante estaba sometida a una fuerte presión por parte de Von Trier, quien le exigía entrara por completo en el papel, y la hacía repetir una y otra vez las secuencias, hasta que la intención que él buscaba se reflejara en el personaje.

Para Björk, el desgaste emocional fue tanto que había rumores de que a diario se enfrentaba con el director y ella no perdía oportunidad de escupirle los pies.

El gran desencuentro fue al terminar la filmación cuando, presa del coraje y el estrés acumulado, literal se comió el vestido que usaba, salió corriendo del set sin rumbo fijo y no se supo nada de ella durante dos semanas.

Jack Nicholson

En la misma línea de películas con temas de alta intensidad, se encuentra One Flew Over the Cuckoo’s Nest (1975), protagonizada por este gran maestro de la actuación.

Dennis McDougal, autor del libro Jack Nicholson, la biografía, relata que para este filme multipremiado, el histrión pasaba días enteros en el hospital psiquiátrico donde se rodó y sólo salía para cenar y dormir, además se sometió a terapias de electroshock para así descifrar el comportamiento y las sensaciones que experimentaba un paciente.

Llegó a compenetrarse de tal manera con su papel de Randle Patrick McMurphy que lograba una gran relación con el resto del elenco, muchos de ellos pacientes esquizofrénicos reales.

Marilyn Monroe

La vida de esta icónica mujer siempre estuvo plagada de misterio, leyendas y mitos, y su carrera artística no sería la excepción. De la extensa lista de películas en las que participó, sin duda, The Misfits (1961) escrita en especial para ella por en ese entonces su esposo, Arthur Miller, fue uno de los mejores papeles de su trayectoria. Y no era para menos.

Miller incluyó pasajes reales de la historia de la actriz, lo que contribuyó a su destacada actuación (que por cierto, no era común…).

Interpretarse a sí misma la hizo desnudar su alma frente al espejo. En algunas de las cartas que después de la filmación envió a su entrañable amigo Lee Strasberg, registradas en el libro Marilyn Monroe, fragmentos, le hablaba acerca de lo deprimida que ella se sentía y lo mucho que le costaba concentrarse y estar anclada al mundo.

A la hora de rodar, la rubia se ponía tan nerviosa que olvidaba los diálogos o tartamudeaba, y cuando eso sucedía le daba por salirse de la grabación sin dar explicaciones.

Al final, la melancolía terminó por hundirla, y consumió alcohol y pastillas para dormir en exceso, falleciendo de manera sorpresiva un año después del estreno de la mencionada cinta.

Robert De Niro

Para él, aún no existe un papel con el que no se comprometa por completo, y si de algo pueden estar seguros los directores, es que hará lo necesario y más, para darle vida real a los personajes que interpreta.

Todos sus proyectos dejan claro su profesionalismo, pero si uno ha marcado su carrera ha sido Raging Bull (1980), donde protagonizó al famoso boxeador Jake LaMotta.

Shawn Levy, autor del libro De Niro: A Life, relata que el actor no sólo entrenó con el campeón mundial que inspiró la película, sino que además participó en peleas reales, aumentó 27 kilos de peso en tiempo récord y, como el personaje era violento con su esposa, el actor italoamericano llegó a repetir este patrón con Diahnne Abbott, su pareja en ese entonces.

La película marcó su despegue rumbo a la consagración, le valió un premio Oscar al Mejor Actor y su rol fue memorable, pero a costa de una depresión profunda que le causó sobrepeso y dificultad para recuperarse.

Después de esa experiencia, llegó al acuerdo de que cada vez que preparara un papel, se alejaría del hogar, situación que eventualmente le costó su relación.

Otros actores afectados por sus personajes

¿Cómo olvidar a aquellos actores capaces de cambiar su cuerpo por un personaje?

  • Matthew McConaughey (Dallas Buyers Club)
  • Chris Hemsworth (In the Heart of the Sea)
  • Renée Zellweger (Bridget Jones’s Diary)

Algunos que se pusieron a estudiar:

  • Natalie Portman dedicaba cinco horas diarias a practicar ballet para Black Swan.
  • Eddie Redmayne se entrenó para controlar sus movimientos y personificar a Stephen Hawking en The Theory of Everything.