Cuando te toca ser ser visita y no anfitriona, es importante tomar en cuenta no solo las reglas básicas de protocolo y sociedad que damos por hecho todas conocen, es decir, ser puntual, agradable y agradecida. También es básico seguir un par de normas extra para que a cualquiera le dé gusto recibirte en su casa y seas la primera en la lista de invitados de una reunión. Toma nota:
1. Jamás llegues con las manos vacías, aunque sean tus amigas de toda la vida y exista plena confianza. Unas flores, una botella de vino o hasta una vela, siempre son muy bien recibidos.
2. Nunca llegues de sorpresa y sin avisar. Toma en cuenta los tiempos de la otra persona y siempre pregunta antes si es un buen momento para visitar. Apégate al horario que te den y llega a tiempo.
3. Al terminar de comer, ayuda a recoger los platos. Si te sirven café, ofrécete a recoger la taza. Ofrece ayuda para poner la mesa, cualquier cosa que te muestre como una persona solidaria.
4. Haz un esfuerzo por verte presentable como cortesía hacia la otra persona y evita llegar en las peores fachas.
5. Olvídate de tu celular por un rato, concéntrate en la conversación y en pasar tiempo de calidad con la gente que te invitó a su casa.
¿Qué otras reglas consideras que se deberían seguir o cuáles aplicas tú?