Se filtran los mejores secretos de belleza de las icónicas supermodelos de los 90s

Hicieron del modelaje una profesión top, rodeadas de los grandes diseñadores de la época, viajando en primera clase hacia las principales capitales de la moda, apareciendo en los videos musicales del momento y protagonizando las campañas de publicidad lo mismo de firmas de lujo que de bebidas carbonatadas. Poco más de 30 años después, los ecos de sus aventuras como celebridades, empresarias y activistas siguen resonando, y su presencia en las pasarelas agrega un halo de glamour al evento. Pero a sus 50 y más años cumplidos ¿cómo le hacen para mantener una imagen divina? Aquí te lo decimos.

Naomi Campbell 
Para mantener tonificado su cuerpo, su combo favorito es yoga, Pilates y entrenamientos de fortalecimiento muscular. Su gusto por el ejercicio es algo relativamente reciente, como ella misma confesó, y el responsable de su afición su coach personal. El plan de Joe Holder se basa en rutinas rápidas con repeticiones de movimientos precisos en las que, principalmente, se trabaja con el peso corporal propio.  Su alimentación también es metódica, pues sigue un plan clean y vegetariano basado en frutas, verduras y caldos. “Lo primero que hago es tomar agua caliente con limón y probióticos. Nunca tomo café; no me gusta su olor. Soy bebedora de té”, comentó para Bazaar. Aunque, a veces, se permite caprichos. “Cuando no estoy trabajando evito usar maquillaje. Me gusta tener la piel limpia”, dijo. Entre sus productos favoritos destaca una bruma facial con zinc, seguida de una mezcla de sueros antioxidantes y nutritivos. 

Elle Macpherson 
Para mantenerse escultural ya no se encierra en el gimnasio, practica yoga, spinning, senderismo o nada en la playa. Si está de viaje, recorre su entorno corriendo o caminando. “La genética tiene un límite. Cuando llegas a los 50 te das cuenta de que lo importante es cuidar tu cuerpo y tus niveles de vitalidad para poder hacer las cosas que quieres. He probado todo tipo de ejercicios y dietas, pero muchas de las cosas que hacía a los 30 y los 40 ya no me funcionan. (Ahora) no me preocupa envejecer; me interesa mucho más mi bienestar. Creo que la verdadera belleza está en el alma, no en la piel”, explicó a la revista Red el año pasado. Es partidaria de una alimentación balanceada. Su día lo inicia con agua caliente y limón para reactivar su metabolismo. Después, medita por unos 20-30 minutos. Y continúa con una alimentación enriquecida con proteínas y suplementos de su propia compañía. En total realiza 3 comidas y dos refrigerios. En materia de cuidados de belleza, ama exfoliarse diario el cuerpo, mientras que a su cara la mima con sueros y humectantes de Dr. Barbara Sturm, y es devota fiel del uso del bloqueador. 

Claudia Schiffer 
Es fan de la diversidad, corre, juega tenis, practica yoga o, su favorito, Pilates. Por años su entrenador personal ha sido David Higgins, quien recientemente lanzó el libro: The Hollywood Body Plan. 
Su dieta también es muy estable, realiza de tres a cuatro alimentos al día, asegurándose de no superar las 1,200 calorías en total. Si un día amanece de mala cara toma más agua, evita lácteos y cereales, sale a caminar media hora y se aplica corrector. “Me levanto temprano con los niños y necesito prepararlos para la escuela, por lo que mi cuidado de la piel tiende a ser el mismo”.  Acostumbra mezclar su humectante con aceites, y lo aplica con un masaje facial que activa el flujo de la sangre. Si toma un baño de tina, agrega sales de Epsom. Y para aumentar la hidratación en la noche usa Black Rose Cream, de Sisley. 

Linda Evangelista 
La modelo que un día afirmó que no saldría de la cama por menos de 10 mil dólares, lucha por recuperar su imagen. Su tragedia inició hace siete años, cuando se sometió a una alternativa a la liposucción (CoolSculpting), lo que desencadenó en una hiperplasia adiposa paradójica, que es cuando el tejido adiposo en lugar de reducirse se espesa y expande. Con protuberancias que no merman con dieta ni ejercicio, se recluyó y deprimió hasta que, a principios de año, decidió narrar su historia: “Continuaré compartiendo mi experiencia para deshacerme de la vergüenza, aprender a amarme a mí misma nuevamente y, con suerte, ayudar a otros en el proceso”. A sus 57 años, reapareció hace unas semanas cobijada de Fendi, protagonizando una campaña y con planes de desfilar de nuevo. Antes de este episodio, la canadiense se consideraba adicta a los productos para el cuidado de la piel e, incluso, tomó el cargo de directora creativa de la firma Erasa. También ha sido fan del exfoliante P50, de Biologique Recherche, y del limpiador Pro-Collagen Cleansing Balm, de Elemis. Aunque fue imagen de cosméticos, evita maquillarse a diario. Cuando lo hace, le gusta Living Luminizer, de RMS, y Terracotta 4 Seasons Bronzer, de Guerlain. Igual de diverso era su modo de ejercitarse al practicar spinning, pesas o remo.