Kate Middleton visitó la ciudad de Leeds como parte de su campaña Shaping Up, que busca crear conciencia sobre el impacto transformador que se crea en los niños durante sus primeros años de vida, cuando están rodeados de apoyo y cuidados. Ahí se reunió con universitarios y no dejó pasar la oportunidad de comentar que le encantaría volver a estudiar.
También se dio el tiempo de recorrer el mercado Kirkgate para saludar y escuchar a los vendedores y preguntarles sobre sus primeros años de vida. Y fue en este momento cuando en medio de la multitud, un hombre lanzó un chiflido en su dirección, sorprendiendo a todos los que se encontraban en el lugar.
Ante el asombro, la Princesa de Gales hizo oídos sordos al incómodo momento, decidió ignorar por completo lo sucedido y continuó su recorrido sonriendo y saludando a los presentes.
Según reporta Daily Mail, este suceso dejó atónitos a muchos, pues apenas unas semanas antes se habló de que chiflarle a alguien en la calle podría ser ilegal, considerado como acoso y tendría un castigo de hasta dos años de cárcel.