El 2021 y 2022 has sido dos años de gran avance para México en materia de despenalización del aborto. Desde el segundo semestre de 2021 y hasta este trimestre de 2022, se sumaron a la lista cinco estados en los que el aborto es legal, pero, además, está despenalizado:
- Hidalgo, desde el 30 de junio de 2021.
- Veracruz, desde el 20 de julio de 2021.
- Baja California, desde el 30 de octubre de 2021.
- Colima, desde el 1 de diciembre de 2021.
- Sinaloa: desde el 8 de marzo de 2022.
¿Cual es la diferencia entre que el aborto sea legal y esté despenalizado?
Aclaremos: el aborto el legal en todo México, siempre y cuando el causal sea violación o si el embarazo pone en riesgo la salud y/o la vida de la mujer. No obstante, en México el aborto está despenalizado únicamente en siete estados: CDMX, Oaxaca, Hidalgo, Veracruz, Baja California, Colima y Sinaloa, esto significa que cualquier mujer puede abortar legal y gratuitamente hasta la semana 12 de gestación, sin importar la razón por la que ella haya tomado esta decisión.
Para leer más sobre el contexto de cómo está actualmente el tema de la interrupción legal del embarazo en México, lee esta nota: Cuál es la situación actual del aborto en México en 2022.
El problema es que, a pesar de todos los avances que se han dado estos últimos años en materia de derechos sexuales y reproductivos, no sólo en México sino en toda Latinoamérica, aún existen mitos, juicios y estigmas sobre las mujeres que necesitan acceder a este servicio de salud.
De acuerdo con Teresa Herrera, Comunicación Social de Fundación Marie Stopes México,
“Nos llega una cantidad enorme de testimonios y dudas de mujeres que no tienen a quién acudir, por lo que se acercan a nosotras. Esto nos ha hecho ver que todavía prevalece la desinformación respecto al tema de interrupción legal del embarazo.
Algunas de las preguntas, mitos, juicios y estigmas más comunes que nos llegan a través de nuestras redes sociales son:”
¿Qué tipo de mujer aborta? Toda mujer que lo necesite.
Cuando recién se despenalizó el aborto en la Ciudad de México en 2007, se decía que “todas las mujeres iban a correr a abortar”. La realidad es otra. Por el contrario, de acuerdo a las cifras del sector de salud público, desde 2014 el número de interrupciones del embarazo ha disminuido.
Fuente: Secretaría de Salud de la CDMX.
Sobre “el tipo de mujer que aborta”, la respuesta es simple: aborta la mujer que necesita hacerlo. Y ya. Las mujeres que tienen que acceder a una interrupción del embarazo, son mujeres que lo necesitan por diferentes motivos y todos son válidos.
Cada mujer y su historia es única.
De acuerdo con la experiencia de Fundación Marie Stopes, proporcionado interrupciones del embarazo en la CDMX desde el 2008, algunas pueden ser:
- Condiciones económicas adversas.
- Ausencia de deseo de “tener un hijo”.
- Embarazo no planeado.
- Uso inconsistente de métodos anticonceptivos.
- Falla de método anticonceptivo.
- Situaciones de violencia en la pareja (inestabilidad, violencia psicológica y/o física, conflictos, abandono).
- Agotamiento debido a la crianza de otras/os hijas/os.
- Deseo de continuar con otros proyectos personales (educativos y laborales, principalmente).
Mito: “Las mujeres que abortan quedan infértiles”. FALSO.
Esto es completamente falso. Los procedimientos de aborto que recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS), que son la Aspiración Manual Endouterina (AMEU) y la combinación de misoprostol y mifepristona, son tan seguros que la fertilidad regresa a los 8 o 10 días.
Por supuesto que estos procedimientos deben ser realizados por profesionales capacitados y con las tecnologías adecuadas.
Lo que sí podría poner en riesgo la salud y fertilidad de las mujeres, podría ser la práctica del legrado, que la misma OMS considera obsoleta.
Después de un aborto inducido de menos de 13 semanas de gestación, la mujer típicamente ovula dentro de tres a cuatro semanas después, sin embargo, puede ovular tan pronto como a los ocho días.
“Sólo las mujeres jóvenes abortan”.
O “las irresponsables” o “las descuidadas” y demás calificativos peyorativos y falsos. En realidad, si lo pensamos detenidamente, la decisión de acceder a una interrupción del embarazo es una decisión responsable. La mujer, antes de acceder a este servicio, analiza todos sus escenarios y ella decide si desea continuar o interrumpir un embarazo.
Las mujeres que abortan tendrán trastornos psicológicos.
No hay evidencia científica que lo demuestre. Cuando una mujer ha decidido abortar es porque ha razonado esa decisión, incluso hay estudios que demuestran que tras un aborto las mujeres se sienten aliviadas, como lo demuestra un estudio a largo plazo realizado por científicos del Centro Bixby de Salud Reproductiva Global, de la Universidad de California en San Francisco, donde se encontró que el 97.5% de las mujeres se sienten aliviadas después de tener un aborto.
Estos resultados se suman a la evidencia científica de que las emociones sobre un aborto están asociadas con el contexto personal y social, y no son producto del procedimiento de aborto en sí. Las emociones negativas se dan, más que nada por el estigma y la carga social con la que las mujeres han cargado durante años.
Por supuesto que también existen embarazos que sí han sido deseados o planeados, pero que por circunstancias ajenas o de salud, la mujer tiene que acceder a un aborto, como el caso de una gestación que no terminó y deben retirar el producto.
La evidencia muestra que el aborto no está asociado a consecuencias negativas en la salud mental de las mujeres y que el procedimiento en sí mismo no representa un estrés mayor para las mujeres que el de otro procedimiento obstétrico.
Al contrario, lo que muestra la evidencia es que, en realidad, lo que podría afectar a las mujeres a nivel emocional es el estigma y el miedo a ser criminalizadas y no el procedimiento en sí mismo.
Más información sobre interrupción legal del embarazo (ILE) y educación sexual, visita Marie Stopes México.