Originalmente publicada el 11/03/2022.
No solo la reina Isabel II usó una ‘tiara maldita’ el día de su boda, sino que hay otras royals que llevaron en la cabeza una joya con una historia catastrófica detrás. Se llama la tiara de Hojas de Fresa y perteneció a la Casa de Hesse.
La maldición de la tiara de Hojas de Fresa de la Casa de Hesse
La tiara de Hojas de Fresa fue usada por miembros de la Casa de Hesse y el Rin —fue el gran ducado de Alemania occidental que existió de 1806 a 1918—. Fue originalmente diseñada por el príncipe Alberto como regalo de bodas para su segunda hija, la princesa Alicia, en 1862 —se casó con Luis de Hesse.
Desafortunadamente, el príncipe Alberto murió antes de que la boda de su hija tomara lugar, y aunque Alicia sí recibió la tiara, decidió no usarla en aquel especial día. Sí la usó una vez instalándose en Hesse y para presentarse como la gran duquesa.
La primera tragedia ocurrió en 1873 cuando su hijo, Frittie, murió de hemofilia a los dos años. La princesa Alicia murió años después, en 1978, por difteria, a los 35 años porque su otro hijo, Ernest, la contagió.
La tiara de Hojas de Fresa, una joya ‘maldita’ en la realeza
Después de la muerte de Alicia, la primera esposa de Ernest, Victoria Melita de Sajonia-Coburgo y Gotha heredó la tiara. Pero este matrimonio fue muy infeliz y terminó en divorcio. Su única hija murió de tifoidea y un hijo nació muerto.
La segunda esposa de Ernest, la princesa Eleonor de Solms-Hohensolms, también heredó la tiara, pero en ese tiempo la dinastía fue abolida. Entonces le entregó la joya a su nuera, la princesa Cecilie de Grecia y Dinamarca (hermana de Felipe de Edimburgo), quien la llevó a la coronación del rey Jorge VI.
Después ocurrió el terrible accidente aéreo donde murió la familia del príncipe Felipe, incluyendo a Cecilie y Eleonor. Sorprendentemente, la tiara salió ilesa del accidente de avión.
La tiara de Hojas de Fresa la heredó la princesa Johanna, hija de la princesa Cecilie (que se salvó del accidente aéreo por haber sido demasiado bebé para viajar en aquel enotnces). Pero Johanna murió de meningitis a los dos años de edad.
La última royal que usó la tiara de Hojas de Fresa fue Margaret Campbell Geddes, tía de Johanna que además la había adoptado después de que sus padres murieran en el accidente, pero se desconoce si la usó en alguna ocasión —y quizá gracias a esto vivió hasta los 82 años y tuvo una muerte pacífica.
La ‘tiara maldita’ pertenece actualmente a la fundación de la Casa de Hesse, pero ningún otro miembro de la familia real la ha usado desde entonces.